Los creyentes deben evitar a las personas malvadas
Los fariseos y saduceos rodearon a Jesucristo como abejas buscando cualquier oportunidad para morder a su anfitrión. Los enemigos de la religión pusieron trampas y probaron a Jesús en muchos terrenos con la esperanza de que pudiera tropezar en su discurso, para que pudieran arrestarlo y matarlo. Mientras tanto, Jesús fue sensible a reconocer la presencia de sus enemigos, y los puso en el lugar correcto! Cuando los fariseos hicieron una pregunta difícil sobre la resurrección, Jesús los refirió a una escritura que todos en la sociedad respetaban - y los enemigos se callaron
(Lucas 20:27-39). Sin embargo, Jesús advirtió a sus discípulos que estuvieran atentos a los hipócritas que envidiaban su éxito y buscaban su caída. Jesús dijo: "Cuídense de los escribas, que desean ir por ahí con largas vestiduras, aman los saludos en las plazas, los mejores asientos en las sinagogas y los mejores lugares en las fiestas, que devoran las casas de las viudas y por una pretensión hacen largas oraciones. Estos recibirán mayor condenación" (Lucas 20:46-47).
Lección:
Nosotros los cristianos somos hijos de Dios y somos luces que están rodeadas de personas que celebran las obras de las tinieblas; por lo tanto, ¡debemos tener cuidado! Nuestras obras y estilos de vida piadosos a menudo irritan a la gente mundana, y tenderían a reaccionar a cualquier cosa que hagamos. Debemos ser sensibles para no permitir que los malhechores nos arrastren a sus prácticas malignas. No debemos buscar la aceptación del mundo y pecar contra Dios. Los cristianos debemos mantener nuestros estándares piadosos y permanecer atados al cielo. Dios
definitivamente nos dará el poder de superar a nuestros adversarios, y nos recompensará por cada trabajo bien hecho.
Querido Dios, por favor ayúdame a ser sabio y sensible para no convertirme en una víctima de la gente malvada. Ayúdame a abstenerme de personas que puedan influenciarme para pecar contra ti. Dame el poder de permanecer firme en la fe, y déjame mantener mi testimonio piadoso hasta el final para que pueda ser bendecido inmensamente en el cielo. Porque en el nombre de Jesucristo hago mis peticiones. Amén.
